El contrato o acuerdo de confidencialidad es una herramienta poderosa para las empresas que siempre deben tener presente para salvaguardar sus intereses a través de un documento legal que proteja la información sensible que toda empresa maneja y que no caiga en manos equivocadas que le pueda generar conflictos con sus clientes o bien, pérdidas económicas o una crisis de reputación.
Aunque es un documento de gran relevancia, muchas empresas no cuentan con un contrato de confidencialidad con sus empleados desconociendo de que formas puede afectarles no disponer del modelo de contrato dentro de su organización.
Pero ¿Qué es un contrato de confidencialidad?
Es un documento legal que protege la información sensible de la empresa: ya sean datos personales de clientes, información de cuentas, diseños, material de trabajo, contenidos con derechos de autor, otros contratos, acuerdos, negociaciones, cuentas bancarias o cualquier otra información que por naturaleza de la empresa sea considerada como importante y secreta.
Este documento debe ser firmado por el patrón y el trabajador cuando este se integra al equipo de trabajo, expresando la importancia de proteger la información de la empresa que no puede ser revelada a terceros, comprometiéndose a no difundir aspectos determinados de negociaciones, procesos internos que podrían favorecer a la competencia y producir grave daño económico como de reputación.
Es recomendable que se firme un contrato de confidencialidad donde se especifique la información y procesos a los que tendrá acceso el colaborador y que se deberán proteger, porque se obtiene la confianza necesaria para compartir dicha información de forma segura por parte de la empresa.
A continuación, queremos mencionarte una lista de temas en los que se recomienda firmar un contrato o acuerdo de confidencialidad entre empleador y empleado que puede ser de ayuda para que identifiques si tu empresa necesita tener uno para firma:
· En caso de compartir modelos o planes de negocio
· Protección de ideas, prototipos o inventos
· Manejo de fórmulas químicas o médicas
· Manejo de datos económicos y financieros tanto de la empresa como de clientes.
· Por la privacidad de los clientes
· Manejo de marcas y patentes
El contrato de confidencialidad debe proteger específicamente la información que se maneja por eso es importante establecer cláusulas que también protejan a las personas que están recibiendo la información, además por supuesto, de buscar siempre que la empresa y la información que se maneja esté siempre segura.
En caso de que tu empresa todavía no cuente con este valioso documento, es importante acercarte a tu abogado de confianza para elaborar uno adecuado a las necesidades de tu empresa.